jueves, 3 de junio de 2010

Aquellos maravillosos años: La Radio

Soy de una generación en la que la radio todavía era importante en nuestras vidas. Era lo primero que nos dejaban toquetear, puesto que la TV, el vídeo o el tocadiscos estaban prohibidos a nuestros pequeños deditos. Recuerdo cómo mis estados de ánimo se balanceaban al son de las canciones que el presentador de hits de turno (entonces no conocía Radio 3) decidía que sonaran. Podía pasar de la euforia a la melancolía o directamente a la frustración en tres canciones, con el maravilloso factor sorpresa omnipresente. Me doy cuenta de que la sorpresa ha desaparecido de nuestras vidas con la llegada de las listas de spotify o los canales temáticos, donde escuchas y ves lo que te apetece en cada momento, y siento cierta ambibalencia al respecto, puesto que si bien no dependes de nadie para disfrutar de lo que te gusta, tampoco cabe el vuelco al corazón que te daba cuando (por fin) ponían tu canción favorita, ésa que te hacía llorar, soñar o bailar como una loca.

Por eso me ha hecho tanta ilusión descubrir la Wooden Radio Mini del diseñador Singgih Susilo Kartono cuyo objetivo era crear un producto que requiriera una pequeña cantidad de madera para conseguir un objeto pequeño que pasase por un proceso de fabricación que necesitara poco material, pero que tuviese un gran equipo humano detrás, y así crear más empleo, con lo que otro de los objetivos específicos de esta radio es ofrecer oportunidades de trabajo y mejorar las condiciones económicas de un pueblo situado en el centro de Java.

Cada árbol talado es replantado. En cuanto a la regeneración del bosque, Singgih y su equipo cooperan con el colegio de Gunung Sumbling en la plantación de semillas y así convierten una parcela de los alrededores de su taller en un vivero.

Singgih intenta recrear productos incompletos e imperfectos minimizando las características innecesarias. La creación de la imperfección se consigue a conciencia y es intencionada. Los productos no están recubiertos, sino que sólo se les aplica un aceite a la madera para su acabado. Esta aplicación no protege el producto del todo porque la filosofía de Singgih es que debe haber una obligación moral entre consumidor y producto: debemos mantener y cuidar lo que compramos.


El tiempo de fabricación de cada pieza es de 16 horas. Cada radio es única, tiene su número individual y fecha marcados dentro del aparato. Dispone de 2 frecuencias (FM/AM). Se puede conectar a la corriente con un adaptador o funcionar a pilas. La madera empleada es de palisandro sonokeling (color oscuro) y de pino (color claro). Se puede emplear como un altavoz para cualquier dispositivo MP3.

La radio recibió el Good Design Award 2008. Disponible
aquí

2 comentarios:

Laura dijo...

Hola! Gracias por la visita. Yo también soy de esa generación y aunque tengo ipod, spotify y todo eso, al final siempre acabo llevando en el bolso un pequeño transistor. Creo que la radio tiene un gran encanto.
Bss!

formentera dijo...

Hola Miss Marble, yo no llego a tanto en cuanto a música, pero haciendo una analogía, todavía soy de las que me escribo las cosas en la mano para acordarme, a lo sumo en un papel, ni iphones, ni blackberrys. Feliz lunes!